lunes, 16 de febrero de 2009

ÒRÌSÀ ÒSÀ-NLÁ OSALA U ORISA-NLA

ÒRÌSÀ ÒSÀ-NLÁ OSALA U ORISA-NLA


Òrìsà máximo del panteón Yòrùbá. Simboliza la paz , calma, sosiego y equilibrio.
A él fue que Olodumare le encargó la tarea de formar a los hombres y mujeres que conformamos la tierra. Por ese motivo, es llamado el Òrìsà de la creación, la justicia y la armonía. A el le pertenecen los ojos que todo lo ven.
Tiene diversas representaciones como viejo y joven. Es calmo, sereno, pacificador. Es el creador respetado por todos los òrìsà y por todas las Naciones.
En su paso por el aiye Osa-nla fue casado con Nana Buruku.
Òsà-nlá es el representante físico de Dios en la tierra y el líder máximo de todos los 401 Òrìsà móviles existentes.
Òsà-nlá fue el Òrìsà que luego de crearse el aiye, trajo de orun el igi òpe, la palmera sagrada, y la plantó en la tierra para que alimentara a todas las criaturas que por designio de Olodumare, el debía modelar.
Los ancianos de las tierras Yòrùbá cuentan que fue a Òsà-nlá que le había sido dada la misión de soplar el polvo de la creación y así formar el Aiye; pero ocurrió que antes de la partida, Ôsá-nlá consultó a Orunmilá quien le aconsejo ofreciera un sacrificio a Esù para evitar complicaciones en el trayecto. El gran Òrìsà, muy molesto se negó rotundamente a servir a Esù y sin realizar el ebo, parte rumbo al aiye.
Esù, molesto por la negativa de Ôsá-nlá, decide que se cobrará el atrevimiento y muy enojado se venga provocando en Ôsá-nlá una sed intensa. Como no había ningún manantial cerca, Ôsá-nlá no tuvo otro recurso que abrir una cáscara de tronco de una palmera para saciar su sed. La bebida fermentó, produciendo en el Òrìsà Funfun una pesadez total, pero como la sed no cesaba, bebió hasta caer de bruces bajo la palmera, olvidando por completo donde estaba ni cual era la misión encomendada para el. Así saturado de vino de palma quedó profundamente dormido.
Acertó pasar por el lugar Oduduwá , que viendo al gran òrìsà dormido, decidió tomar el saco de la creación e ir en procura de Olódùmàré para contarle en el estado que había hallado a Ôsá-nlá.
Olódùmàré entonces, le entregó la calabaza de la creación a Oduduwa y éste partió hacia su destino.
Luego de la creación del aiye, Orunmila encomienda a Òsà-nlá la tarea de modelalar a los hombres diciéndole que para ello, debe tomar, una parte del orun, otra del aiye y modelar las figuras de hombres y mujeres a su imagen y semejanza, tal como él los creara a ellos . Òsà-nlá presuroso, va a orun y le pide a Ori que le proporcione los elementos para esculpir las cabezas, este se los proporciona y cuando Òsà-nla regresa al aiye, pide ayuda a las otras divinidades para que busquen el material y comienza así a dar forma a los cuerpos. Una vez que Òsà-nlá tuvo listo el molde, Olodumare lo dividió en tres partes esenciales a las que llamó:

ARA ; el cuerpo físico que Òsà-nlá supo modelar y que tocado por la mano de Dios adquirió movimiento. El ara le permite actuar y reaccionar en su ambiente físico y es la parte del hombre que se entierra luego de su muerte. También Olodumare colocó en el ara, el Okàn, que aunque es traducido literalmente como corazón, éste Okàn es invisible al ojo humano y podría traducirse como el sentimiento que permite a la mente (iye) sentir, meditar, amar etc..
EMÍ ; el alma o espíritu. Soplo de vida que Dios concedió al hombre durante su permanencia en la tierra.
ORI INU ; la esencia total de cada hombre. Es el que controla el destino de cada hombre pero no lo obliga.
Los yòrùbá consideran que hay dos tipos de Ori inu; el Orí Rere o buen Orí que trae el ser humano al nacer y el y Orí Burukú, o mal orí y corresponde al caracter que la persona va desarrollando a través de los años, las situaciones especiales de su medio social, la adaptación al mismo y también, debido a fuerzas invisibles negativas que suelen atacar al ser humano.
Cuando el hombre muere, el Emí abandona el ara y regresa al òrun junto a su creador.
Si muere sin haber cumplido con la misión para la que fuera enviada a la tierra, el Emí queda en un plano intermedio, hasta que pueda entrar en otro cuerpo, retornar a la tierra y cumplir con su misión. Una vez que ha cumplido con ella, retornará al Òrun y allí permanecerá, junto al creador.
Siguiendo ésta línea de pensamiento, cuando Orunmila da el soplo de vida, se interactúan Òrìsà, Ori inu y Ara , formando la asimetría que va de D ios al hombre , puesto que Dios controla al Ori inu y a todos los Òrìsà; y éstos, influyen sobre los actos del hombre.
El ota de Òsà-nlá es una piedra blanca y lisa. Acompañan su asentamiento, el opasoro , bastón formado por un palo de plata adosado en su punta con palomas, campanillas, sol, luna, estrella y peces. El opasoro acompañó al gran Òrìsà en su andar por la tierra cuando con él, decidió separar los dos mundos, el aiye y el orun.
El Ekodidí plumas de la cola de un papagayo de la costa africana. Único atuendo de color rojo que le es permitido usar a Oxala.
Su color es blanco . Su número el ocho y los días de culto, domingos y miércoles.
Sus comidas votivas están compuestas de maíz blanco partido (mazamorra), hervida y condimentada con miel.
Arroz o mazamorra con leche, azúcar y canela en vainas.